Mi hermana mayor acaba de parir,
bueno, hace un tiempito, pero no importa, necesita comer sano, estar fuerte…¡¡¡y
es vegetariana!!!
De por si, por varias razones
difíciles de sintetizar, pero que incluyen nuestra fisiología en igual medida
que nuestras pautas culturales y de género, las mujeres tendemos estar un pelín
anémicas. Ni que hablar recién paridas, dando de mamar, o siendo vegetarianas,
en una sociedad que por exceso de trabajo, falta de tiempo y recursos, atenta
contra esta misma dieta. Por todo esto, decidí regalarle a mi hermanita, y a
todxs lxs que lean nuestro blog, con una receta de un guiso de lentejas
anti-anemia… ¡pero sin “carne”, y delicioso!
El secreto del sabor va a estar
en la variedad de los vegetales (yo puse los que a mi me gustan, pero podrían
agregar, por ejemplo, papa y choclo, y queda buenísimo también), y en elegir
las especies que nos gusten, además del gustito fresco que le va a dar el
perejil y el limón. Pero además las lentejas las hortalizas y el perejil tienen niveles muy
importantes de hierro, que combinados con la vitamina c del limón y el perejil,
vamos a poder absorber mucho mejor. O
sea que esta combinación de perejil y limón esta buenísima para cualquier otra
comida que contenga hierro. Un secreto clave: no tomar ninguna infusión
caliente después de este guisito (y tampoco vino…ah, such is life) porque si no
los taninos van a barrer buena parte de estos micronutrientes!
¿Que vamos a necesitar?
Utensilios:
Una olla bien grande, de hierro o barro sería genial.
Una sartén honda.
Cuchara de madera.
Cuchilla afilada.
Tabla de madera.
Un rallador para cascarita.
Ingredientes:
400 g de lentejas (o lentejón si están apuradxs).
¼ de zapallo, o media calabaza.
2 zanahorias medianas.
½ morrón rojo, ½ amarillo y ½ verde, y si no un rojo entero.
2 puerros.
4 cebollitas de verdeo.
1 cebolla mediana (colorada esta buenísimo).
¼ de zapallo, o media calabaza.
2 zanahorias medianas.
½ morrón rojo, ½ amarillo y ½ verde, y si no un rojo entero.
2 puerros.
4 cebollitas de verdeo.
1 cebolla mediana (colorada esta buenísimo).
1 berenjena.
3 dientes de ajo medianos.
1 taza de perejil recién picado.
3 dientes de ajo medianos.
1 taza de perejil recién picado.
4 cucharadas de aceite de oliva o de maíz.
4 tomates perita o una lata de tomates (opcional, si lo usamos
agreguemos también una cuchara de te de azúcar).
½ taza de queso rallado (opcional).
½ limón.
Para condimentar:
Sal y pimienta son imprescindibles, después podemos completar con
pimentón dulce y un toque de comino, sino con Curry, o con ají molido, nuez
moscada, o una rica massala ahumada.
A cocinar!
1) Primero lo primero, limpiar las lentejas, las metemos en el bowl
con agua, mezclamos con las manos para que suba la suciedad, tiramos el agua, y
así varias veces hasta que el agua ya no larga “espuma” y es bien transparente.
Ahí dejamos nuestras lentejas en remojo algunas horas (si queremos todo ya,
ya…en vez de lentejas usen “lentejón” que en 30 minutos, y sin remojo, están
listas).
2) Listo el lavado y el remojo, las ponemos en la olla con abundante
agua y sal, a cocinarse….
3) Mientras tanto, en el palacio de la justicia …agarramos nuestra
tabla y cuchilla bien afilada, y cortamos todos nuestros vegetales (menos el
limón y los tomates) en cubitos bien chiquitos, menos de medio cm, esto se
llama brunoise (Pero la verdad que si están podridxs y no tiene ganas de andar
cortando mucho, se puede cortar un poco mas grande, y en todo caso se cocina
algunos minutos más). Conviene empezar cortando las tiras finitas, y de ahí volver
a cortar para hacer los cubitos.
Entre la cebolla, el verdeo y el puerro corremos el peligro de
quedarnos ciegxs, consejo, tengan el agua fría corriendo, y enjuaguen en ella
el cuchillo todo el tiempo…o consíganse unas antiparras! Mi hermanita la
vegetariana dice que lo mejor es guardar las cebollas en la heladera, les dejo
también este tip.
4) En nuestra sartén, con 3 cucharadas de oliva metemos la cebolla, el
verdeo, puerro, ajo, y zanahoria, a los cuatro minutos agregamos la berenjena y
el zapallo o calabaza. Lo salteamos unos minutos más, hasta que vayan
ablandándose y poniéndose brillantes. Este es un buen momento para rallar un
poco de nuez moscada, y agregar sal.
5) Si quisiéramos la opción del tomate podemos usar los de lata,
cortándolos en dos, sacando las semillas, y cubeteándolos. O pelar unos
frescos, haciéndoles un corte en cruz con cuchillo, y sumergiéndolos unos
minutos en agua hirviendo. La piel se desprende, y seguimos como con los de
lata. Este tomate lo agregamos a la sartén, cocinamos un minuto más, y
agregamos el azúcar, para que nos se nos frunza hasta el alma por la acidez del
tomate.
6) Mientras tanto nuestras lentejas ya se deben haber cocinado media
hora, tiramos buena parte del agua de cocción. Le agregamos todos los vegetales
de nuestra sartén, le agregamos sal y pimienta, y el condimento que hayamos
elegido para levantar el sabor, cocinamos unos minutos más, para que se
concentren los sabores, y apagamos la hornalla.
7) Unos minutos después, le rallamos nuestro medio limón y le
exprimimos el jugo por arriba, finalmente le tiramos todo el perejil picado, y
la cucharada restante de aceite de oliva, tapamos y lo llevamos a la mesa. Podemos llevar queso rallado para que se
agregue quien quiera.
8) Comer todo lo que queramos, es sano, para nada muy calórico, pero
sin prisa y con calma… que las lentejas hacen lo suyo y puede ser complicado
seguir el día :)